Ya "montados en el macho" de las elecciones, creo importante que reflexionemos sobre los temas sobre los cuales deberíamos conocer la posición de los candidatos como prerrequisito para inclinar hacia alguno de ellos nuestro voto. Uno de los temas que considero de suma importancia es el fiscal.
Lo creo tan importante, que considero la posición de cada uno de los candidatos a este respecto como un requisito mínimo que los ciudadanos deberíamos exigirle a los candidatos, y no sólo a los presidenciales sino también, y más importante aun, a los diputados potenciales.
Pero, ¿por qué es de tanta importancia? Sencillo. Porque durante toda la campaña los candidatos se llenan la boca con ofrecimientos de "todo" lo que van a hacer, pero nunca reparan en el pequeño y "despreciable" detalle de con qué dinero van a hacer todo lo que están prometiendo. No nos engañemos, cada "promesa" de los candidatos que en realidad vayan a cumplir (porque la mayoría no) no la van a pagar ellos con su dinero, la pagaremos todos los ciudadanos por medio de los impuestos.
Sin ir tan lejos, el gobierno actual ha gastado algo más de 100 mil millones de Quetzales en 4 años producto precisamente de la expropiación forzosa a que nos somete el Estado. De esa suma, exorbitante, obscena y difícil de asimilar, se han hecho pagos superfluos a grupos de presión, viudas, ex patrulleros civiles Ministros, Ministerios y otros gastos más que se asombraría de conocer.
Y si mi tino no me traiciona podría apostar, sin lugar a equivocarme, que en el próximo período de gobierno, tanto de parte de diputados como de quienes detenten el poder en el ejecutivo, se discutirá tarde o temprano un aumento de impuestos, porque "no alcanza para la labor social" ni para sostener al armatoste estatal.
Ya uno de los candidatos, por ejemplo, ofreció que durante el primer año de su gobierno no va a solicitar que suban los impuestos (lo que implícitamente indica que nos esperemos para ver lo que nos va a tocar el segundo año). El mismo candidato, a los pocos días, expresó que consideraba "aceptable" una carga tributaria del 28% (¡el doble de la actual!). Lo que nos da una idea de lo que podemos esperar para ese tenebroso segundo año.
Entonces, como somos nosotros quienes vamos a terminar pagando sus promesas, lo menos que podemos esperar es que nos digan, al menos, cómo lo van a hacer. O si lo quiere tomar con mayor resignación: si no puede evitar que le roben, por lo menos concédase el gusto de saber de antemano y cuestionar a cada candidato, cómo le van a robar durante los próximos años el fruto de su trabajo y creatividad. ¿O será que alguno de los candidatos va a abanderar el desarrollo económico a través de una menor cantidad y menores tasas de impuestos, especialmente los directos?
Publicado en Prensa Libre el jueves 24 de mayo de 2,007. Imagen tomada del sitio educared.org.gt